Para entender el problema, vamos a empezar dejando claros dos conceptos importantes.
- Para Facebook no existe la figura de «dueño de una página». Al crear una página de facebook, te conviertes automáticamente en administrador de ella, pero si añades más administradores tienen la misma autoridad que tú.
- Todos los administradores son idénticos. Si tu página se llama «Página de mi empresa» todos los administradores escriben como «Página de mi empresa» y no hay forma de distinguirlos.
Partiendo de estas dos lamentables decisiones por parte de Facebook, la lista de barbaridades que puede un comunity manager es interminable.
Supongamos que Manolito es uno de los CM de nuestra página de Facebook al que hemos tenido que dar de alta como administrador para que pueda escribir y subir fotos. Como es una página grande y tenemos otros cinco administradores además de Manolito. Todo marcha bien hasta que un día a manolito se le cruzan los cables y decide hacernos la puñeta:
- Para empezar, Manolito se da cuenta de que nos hemos olvidado de ponerle una vanity URL a la página, como es administrador no tiene ningún problema a cambiarla a facebook.com/somosunosladrones y como facebook no deja cambiar las urls una vez fijadas, o nos aguantamos o tenemos que cerrar la página.
- Como es administrador y puede «usar Facebook como una página», activa esta opción y se dedica a escribir burradas en las páginas de la competencia. Aparte del lío en el que nos mete, es daño de imagen es irreparable.
- Como todos los administradores son iguales y no hay forma de saber quién ha escrito qué, escribe en nuestra página diciendo que nuestra empresa va a cerrar y que al presidente lo han metido en la cárcel.
- Llegados a este punto, el resto de administradores ya se han dado cuenta del problema, pero como Manolito es administrador, antes de le puedan quitar los permisos, borra a todo el resto de administradores. De cara a Facebook, la página es suya.
- Por supuesto, antes de que pase un día ya sabemos quién es el culpable y podemos tomar medidas contra él, pero el daño ya está hecho y toda la inversión que hemos hecho en la página, perdida. La página podemos recuperarla si su nombre coincide con el de nuestra empresa (y podemos demostrarlo) pero tenemos que darnos prisa porque si Manolito ha pedido que se borre la página, sólo tenemos 30 días antes de que desaparezca para siempre.
- Afortunadamente este caso es ficticio, pero cada una de las burradas de Manolito está basada en un caso real, aunque tengo que reconocer que en la mayoría de los casos se trataba de actos cometidos por ignorancia y no por mala fe.
Moraleja
- La próxima vez que alguien te diga lo de «No te preocupes, yo tengo un amigo que entiende de ordenadores que nos va a llevar el Facebook» acuérdate de Manolito y piensa lo caro que te puede salir ahorrarte el sueldo de un Comunity Manager.
- P.S.: Manolito sí que existe, es un dummy que llevo utilizando durante años para toda clase de demos. Ya tiene hasta su propio perfil de Facebook